Durante toda la vida, nos encontramos ante la desafiante tarea de tomar decisiones:
elegir profesiones, trabajos, sueños, parejas e incluso las emociones con las que enfrentamos las situaciones.
Las elecciones son una parte constante de nuestro viaje.
A veces, nuestras elecciones son automáticas, pero cuando la duda nubla nuestra capacidad de tomar decisiones rápidas,
estamos atravesando un proceso de madurez.
La duda es el primer paso hacia el crecimiento, ya que nos lleva a cuestionar el qué,
el por qué y el para qué de nuestras elecciones.
El malestar es necesario para que sintamos la necesidad de reflexionar
y mirar las cosas desde una perspectiva diferente. De lo contrario, seguiríamos haciendo lo mismo de siempre.
Sep. 25, 2023